CAPÍTULO 6
El Señor recobrará a Israel en los últimos días—El mundo será quemado con fuego—Los hombres deben seguir a Cristo para evitar el lago de fuego y azufre. Aproximadamente 544—421 a.C.
1 Y ahora bien, he aquí, mis hermanos, como os dije que iba a profetizar, he aquí, ésta es mi profecía: Que las cosas que habló este profeta aZenós concernientes a los de la casa de Israel, en las cuales los comparó a un olivo cultivado, ciertamente han de acontecer.
3 ¡Y cuán benditos los que hayan trabajado diligentemente en su viña! ¡Y cuán malditos los que sean echados a su propio lugar! Y el mundo será aquemado con fuego.
5 Por tanto, amados hermanos míos, os suplico con palabras solemnes que os arrepintáis y vengáis con íntegro propósito de corazón, y os aalleguéis a Dios como él se allega a vosotros. Y mientras su bbrazo de misericordia se extienda hacia vosotros a la luz del día, no endurezcáis vuestros corazones.
6 Sí, hoy mismo, si queréis oír su voz, no endurezcáis vuestros corazones; pues, ¿por qué queréis amorir?
7 Porque he aquí, después de haber sido nutridos por la buena palabra de Dios todo el día, ¿produciréis mal fruto, para que seáis atalados y echados en el fuego?
8 He aquí, ¿rechazaréis estas palabras? ¿Rechazaréis las palabras de los profetas; y rechazaréis todas las palabras que se han hablado en cuanto a Cristo, después que tantos han hablado acerca de él? ¿y negaréis la buena palabra de Cristo y el poder de Dios y el adon del Espíritu Santo, y apagaréis el Santo Espíritu, y haréis irrisión del gran plan de redención que se ha dispuesto para vosotros?
11 ¡Oh amados hermanos míos, arrepentíos, pues, y entrad por la puerta aestrecha, y continuad en el camino que es angosto, hasta que obtengáis la vida eterna!
13 Por último, me despido de vosotros, hasta que os vuelva a ver ante el placentero tribunal de Dios, tribunal que hiere al malvado con aterrible espanto y miedo. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario